Las actualizaciones realizadas por WhatsApp, han tenido un gran impacto para sus usuarios; y pareció no ser tan positivo. Facebook, propietario de esta aplicación, ha estado envuelto en distintos escándalos por la falta de seguridad para los datos de sus consumidores, y es esto lo que ha provocado que los mismos, tengan poca confianza ante esta plataforma. Muchos de los usuarios de WhatsApp, mostraron inconformidad ante la mala explicación de los nuevos términos, ya que hace parecer que su privacidad podría estar comprometida. En realidad, esta red social ya recopila bastante información compartida en WhatsApp; desde hace cinco años, conoce los números de teléfono que se utilizan, la constancia con la que se utiliza la app, realiza una estimación de tu ubicación por la conexión a Internet, entre muchas otras cosas. Pero ¿para que se utiliza toda esta información? Para publicidad. Facebook con esta información, logra ayudar a que ciertas compañías lleguen a su target meta, mostrándoles publicidad de productos o servicios que los usuarios comparten en sus redes sociales.

Tus conversaciones y tus llamadas están codificadas, por lo que Facebook no puede mirar su contenido o escuchar tus pláticas. Entonces, ¿cuál es el fin de todos estos cambios? En realidad, lo que Facebook busca es permitir que mediante WhatsApp puedas chatear con las compañías de tu interés, buscar y pagar por productos o servicios. Esto quiere decir que se podría tener la posibilidad de realizar transacciones comerciales, que se puede compartir entre las aplicaciones de Facebook. Un ejemplo: si tú llegas a compartir en WhatsApp una foto de cierto producto, en tu Instagram podría aparecerte la publicidad de este.